PARTE 7

¡A UNA DISTANCIA DE CIENTO OCHENTA GRADOS    EL UNO DEL OTRO!

Por el Hermano MOSHE YOSEPH KONIUCHOWSKY

 

PARTE 7 DE LA SERIE SOBRE LA PLENA RESTAURACION DE ISRAEL! 

La Verdadera restauración del pueblo de Israel, formado por las dos casas, no tiene prácticamente nada en común con las enseñanzas históricas del Israelismo Anglo o Británico. ¡Los teológos de las dos casas no utilizan ningunos recursos ni materiales anglo-israelitas, como apoyo a la pureza de la esperanza que reside en los del Israel mesiánico, sino que mas bien esperan, como lo hicieron los 12 talmidim, la plena consolación de Israel! (1) 

 

La plena restauración de las dos casas de Israel fue explicada, anunciada por adelantada y documentada por el Maestro Yahshua y los profetas de Israel para estos últimos días. El concepto se encuentra en las Escrituras y data de la fecha del 700 a. de C. con las declaraciones de Oseas en su capítulo uno, donde Judá e Israel se reunirán de nuevo por opción del Mesías Yashua, como su dirigente.

 

Por otro lado, un británico llamado Richard Brothers comenzó el israelismo británico entre el 1757 y 1824, (2) que alcanzó reconocimiento mundial gracias a los escritos y enseñanzas de Hebert W. Armstrong. Brothers era bastante excéntrico y mas adelante fue confinado en un asilo para deficientes mentales, pero su profecía clave, según la cual los hebreos recuperarían el control del Monte del Templo en 1798 resultó falsa. Existen diferencias principales muy evidentes entre el punto de vista de la pura restauración no contaminada y la elitista y con frecuencia racista del israliesmo bitánico, adoptada por estas dos figuras y muchas otras.

 

Primero y ante todo, el israelismo británico enseña que los judíos no son Israel y no tienen ninguna parte en Israel. Como los que defienden ser la Casa perdida de Israel, afirman que no hay judíos en esa casa, pero no es eso lo que enseñan las Escrituras. En ambas casas había una superposición de la población de la otra casa de Israel y, por lo tanto, ambas casas contienen una representación casual de las 12 tribus, pero no la totalidad de las 12 tribus. El entendimiento racista del Israel británico continua enseñando que cuando llegó el momento de que la raíz de Efraín floreciese, los judíos fueron sometidos y fueron subordinados a los efrainitas o a las gentes de habla inglesa y, por lo tanto, los anglosajones gobiernan ahora el globo y el resto de Israel en lugar de que la nación judía gobierne continuamente como dijo Yahuwah. Enseñan equivocadamente que como la nación primogénita de José (de la que forman parte), ellos poseen la autoridad para gobernar a las 12 tribus debido a esa misma primogenitura.

 

Por lo tanto, en el isralismo británico el cetro no continua en manos de Judá, sino que se encuentra ahora en las de José. Sin embargo, según Génesis 49:10 la corona o cetro le pertenecerá a Judá o se encontrará entre los judíos hasta que el Mesías venga y establezca la gloria del reino milenario. Puesto que dicha gloria milenaria no se ha establecido aún, el derecho a gobernar se encuentra entre los judíos y su Rey Yahshua (Salmos 78:67-68). No solo es ésta una forma malvada y absurda de teología del reemplazamiento, sino que transgrede literalmente un sinnúmero de pasajes de las Escrituras que se refieren a todo Israel, incluyendo a los judíos, como la cabeza y no el rabo. ¡Los judíos no están destinados a ser el rabo de José! El israelismo británico, a fin de tener éxito, tiene, por definición, que mandar sobre la parte judía de Israel. Este razonamiento falaz asegura que puesto que la Gran Bretaña es Israel, ninguna otra nación puede ser como otras, como dice E. Odlum en su libro "God’s Covenant Man-British Israel." Según su definición, no es posible que existan dos naciones de población y transfondo israelita, cuanto menos dos reinos de Israel legítimos, según el israelismo británico. Por lo tanto, el Israel judío dejó de existir debido a su supuesto rechazo del Mesías Yahshua en el año 33 A.D. Este rechazo fue la causa que movió a Yahuwah a transferir el cetro a José. Los judíos no tienen parte en esta nueva y única nación global y han sido reemplazados por un nuevo pueblo del pacto que son los anglo israelitas.

 

El israelismo británico continua enseñando que solamente las personas inglesas anglosajonas son Israel negando, por lo tanto, la verdad bíblica de que todos los descendientes de las diez tribus se encuentran por todo el oeste e incluso el este en naciones como puedan ser Irak, Iran, Japón y China. Hace caso omiso de la constancia histórica y seglar de que muchos de los pueblos, que no son de habla inglesa, también descienden de las diez tribus. La historia apunta tanto a América del Sur como Central, como naciones que están llenas de las ovejas perdidas de la Casa de Israel, a pesar del hecho de que en muchos casos estas naciones no hablan inglés para nada. Lo mismo es cierto de partes de Rusia y de Asia, hogar de millones de ovejas israelitas perdidas, que no son anglosajonas. La arrogante declaración de que todos los hijos de José son en la actualidad exclusivamente anglosajones es racista hasta la médula. Este racismo se practica en contra de aquellos que son israelitas en otras naciones, incluyendo las judías, y no encaja con el papel que corresponde al de un miembro de habla inglesa de Gran Bretaña ni con ninguna de las colonias o comunidades. Este veneno, juntamente con la eliminación teológica de los judíos y el que hagan caso omiso, de manera deliberada, del propósito de los planes de Yahuwah en los tiempos del fin para los judíos pone de manifiesto el racismo angloisraelita en su centro mismo. Cierto que la teología acerca de las dos casas de Israel enseña a amarse y aceptarse la una a la otra y a tender puentes de tolerancia y entendimiento entre todos aquellos que aman a Yahshua, no limitando la herencia israelita a un solo grupo en exclusiva. La teología acerca de las dos casas continua enseñando que las ovejas perdidas de la Casa de Israel (las 10 tribus) pueden, de hecho, tener alguna relación con el pueblo británico, pero en realidad puede ser de muchos colores, lenguas e idiomas, representados por el manto de muchos colores de José.

 

Una de las principales premisas del israelismo británico es que Yahuwah profetizó que se le llamaría a Efraín "grande" y que éste sería una comunidad de naciones. Puesto que a Gran Bretaña se le llama "gran" y fue y, en cierto sentido, sigue siendo una comunidad de naciones coloniales, por ello Génesis 48:18-20 identifica a Gran Bretaña sola como Efraín y es precisamente en este versículo en el que se basa el israelismo británico. Si hubiésemos de desbancar esta manera de entenderlo mediante una exégesis sencilla y correcta, podríamos silenciar a los defensores del Israel británico y sus declaraciones racistas. Examinemos de cerca estos versículos. Génesis 48:19 no enseña que Efraín, el hermano menor, se volverá grande como Gran Bretáña, sino que afirma sencillamente que Efraín "será engrandecido" no que será "superior." De hecho, del que se dice que será "mas grande" es de Manasés y según el israelismo británico los Estados Unidos son Manasés. Si bien es posible que sea así, efectivamente, y solo en parte, a Efraín no se le llama nunca grande y, por lo tanto, no puede limitarse a la sola nación de Gran Bretaña y sus colonias.

 

Tal vez un problema mas evidente es que el símbolo principal y el antisímbolo del Israel británico no encajan, ni desde el punto de vista histórico ni del profético. Si Efraín es solo Gran Bretaña y los Estados Unidos son solo Manasés, y si el patriarca Israel profetizó que Efraín es mas grande, ésto no se ha producido con exactitud, desde el punto de vista histórico. Desde la década de los 30, cuando Inglaterra se volvió en contra del remanente judío en "Palestina" los EE.UU.A. se han convertido, con mucho, en una nación superior, desde el punto de vista militar, económico y prácticamente en cualquier otro sentido imaginable. Por lo tanto, la historia enseña que Estados Unidos se convirtió en la nación "mas grande". Si los Estados Unidos son exclusivamente Manasés y se convirtió en una nación superior a Gran Bretaña o superior a lo que lo fue Efraín, el símbolo y el antisímbolo no encajan. ¡Si los símbolos no encajan es preciso condenarlo.

 

Además el israelismo británico traduce mal y manipula el final de Génesis 48:19 para que diga una comunidad de naciones o una multitud de naciones cuando el hebreo, "melo hagoyim" no significa ni comunidad ni multitud, sino que significa mas bien la plenitud de gentiles individuales o posiblemente la plenitud de las naciones. Por lo tanto, la afirmación acerca del Israel británico, en relación con la exclusividad de ser Efraín y su afirmación de que Génesis 48 llama a Efraín tanto "grande" como "comunidad de nacioines" es equivocado y no se encuentra en el texto hebreo. Es Manasés al que, de hecho, se hace referencia como un "gran pueblo" y acerca de Efraín se dice que llenará las naciones (no una nación) de la semilla israelita. El israelismo británico afirma que Gran Bretaña es todo Israel y que contiene toda la semilla israelita. Como hemos subrayado ya en las partes una a cuatro de esta serie, la manera correcta de entender estos versículos es simple cuando se deja en su contexto original. Es decir, que el esperma de Efrain llenará las naciones o las naciones que no son israelitas de la semilla de Israel, no limitando su plenitud a una sola nación.

 

¡Abraham, Isaac y Jacob habían de convertirse, desde el punto de vista físico, en los padres de muchas naciones, no solo de Gran Bretaña! La verdad acerca de las dos casas enseña que la semilla de Efraín, como la semilla prometida a los patriarcas de Israel, relacionada con la multiplicidad física, era algo que se aplicaría a todas las naciones, tribus, familias y lenguas el mundo conocido. Esto incluye a Gran Bretaña y a América, pero NO ESTA LIMITADO A ESTOS DOS PAISES O A NINGUNO DE LOS PERTENECIENTES A LA COMUNIDAD ANGLOSAJONA DE NACIONES. La verdad acerca de las dos casas reconoce a Gran Bretaña y a América, juntamente con otros lugares como puedan ser Australia, la Europa del este, Nueva Zelanda, partes de Africa, Asia, Siria y Asia Menor, todos ellos como centros de establecimiento y morada de las diez tribus. Estos detalles los ofrecemos y han sido anteriormente documentados en partes de esta serie.

 

La teología de las dos casas denuncia el racismo, por definición, negándose a limitar la dispersión global de Efraín a uno o dos países de habla inglesa. Por lo tanto, la verdad sobre las dos casas es una doctrina de inclusión, basada en la promesa del pacto hecha a los patriarcas, en oposición a la doctrina de la exclusión de la mayoría de las naciones y de la nación judía, como promueve descaradamente el israelismo británico. Génesis 48:16 enseña que estos dos niños se convertirían en una multitud en medio de toda la tierra, no solo en medio de Inglaterra y, por eso, el israelismo británico es profundamente racista, puesto que se niega a reconocer la dispersión global de las ovejas perdidas de ambas casas de Israel, limitándola a las Islas Británicas y a solo una de las dos casas. La teología de las dos casas no impone semejantes limitaciones.

 

¡En Deuteronomio 32:8-10, en una de las mas convincentes declaraciones de todas las Escrituras, Yahuwah afirma que El ha designado y asignado los límites nacionales de TODAS LAS NACIONES QUE NO SON ISRAELITAS, basándose en el número de los hijos de Israel o, para expresarlo de otro modo, el número de los descendientes de las 12 tribus, sería tan enorme y numeroso, que cuando el Todopoderoso Yahuwah distribuyó la herencia de la tierra a las naciones que no eran israelitas y diseñó sus límites geográficos, el factor determinante del que se valió fue el número de israelitas que podían caber en ellas, de manera razonable! Esto demuestra la inmensidad de la plenitud global de Efraín/Israel y contradice la afirmación del israelismo británico de que es el único grupo o nación en el que viven inmensos números de israelitas dispersos, asi como la afirmación del judaismo mesiánico de que la diminuta Judá es el Israel reconstituido con las 12 tribus. Yahuwah necesita al mundo entero para dar cabida a la descendencia de Israel, pero con todo y con eso Gran Bretaña afirma que las naciones anglosajonas confederadas por si solas pueden dar cabida a ese inmenso número. Las afirmaciones del Judaismo Mesiánico resultan igualmente insostenibles. Ahí está uno de los principales fallos del israelismo británico. El término "grande" lo usa también para referirse a Ismael o los actuales árabes en Génesis 17:20 y Génesis 21:18. ¿Significa eso que los ismaelitas actuales, por sí solos, son las diez tribus perdidas de Israel? ¡Claro que no! ¡No lo son, aunque debido a la enorme multiplicación de la semilla de Efraín hay, sin duda, israelitas perdidos también entre los ismaelitas! Resulta interesante que a pesar de la afirmación hecha por el israelismo anglo, en el sentido de que ese país da albergue a todas las ovejas perdidas de las diez tribus, no hay espacio suficiente para los exiliados judíos o las ovejas judías, que vagaron entre las diez tribus como resultado del cruce histórico!

 

Quedan excluidos a menos que vengan a "Cristo." No hay lugar, de ninguna manera, para el judío errante, no regenerado, en el anglo israelismo, como un heredero absoluto del pueblo unido de Israel. Eso es totalmente contrario a lo que, de hecho, enseñan las Escrituras. Estas enseñan que cuando Israel sea completamente restaurada, incluirá, como es natural, a los judíos de todas las naciones. La teología de las dos casas no excluye o relega, de ninguna de las maneras, a los judíos, haciendo que sean reemplazados, ni descuidados ni los convierte en una nación descartada.

 

El anglo israelismo afirma que los anglosajones son los únicos que son los descendientes puros, sin contaminar, de las diez tribus de Israel. ¡El problema con esto es que estos "israelitas puros" son una mezcla de sangre célta, normanda y germánica (4)! Hay más sangre alemana o edomita en las monarquías de la Gran Bretaña de lo que hay sangre anglosajona. Todos los reyes de Inglaterra, la única nación que se supone que es puramente efrainita, son realmente el resultado de una mezcla entre la Casa de Hanover y la Casa de Brunswick (5), ambas de genealogía germana. A los actuales monarcas antes de que se les conociese como la Casa de Windsor o los Windsor, eran conocidos como los Saxo-Coburgo-Gotas de ascendencia alemana. Adoptaron el nombre familiar de Mountbatten-Windsor en 1917 del Castillo de Windsor durante la Primera Guerra Mundial, por motivos evidentes. (6) En otras palabras, los monarcas de Inglaterra son mas alemanes o edomitas de lo que son "israelitas puros", incluso aunque existiese un concepto verificable como el de la pureza israelita. Por lo tanto, el trono de Inglaterra tiene más vínculos de unión con Alemania y con la Roma histórica, que con las diez tribus de Efraín/Israel. Por lo tanto, el verdadero rey sobre las dos casas de Israel (7) es un judío, no un efrainita ni un alemán, por mucho que eso pueda molestar a los israelitas británicos.

 

Otros israelitas británicos, en un esfuerzo por conceder un grado de viabilidad a sus absurdas afirmaciones de que la monarquía inglesa desciende directamente de Judá, de hecho intentaron hacer malabarismo con las genealogías de Mateo y Lucas, según Foy. (8) De hecho, han vuelto a escribir las genealogías con el fin de crear algunas conexiones superficiales y falsas con la Casa real de David. ¡Estas genealogías blasfemas de los supuestos lazos de unión judaitas de la casa de Brunswick han sido creados tomando, convenientemente, 32 generaciones desde Lucas 3:32-38. Y a continuación, en medio de la genealogía de Lucas, comenzando por Lucas 3:33 cambian de repente a la genealogía de Mateo, capítulo uno, versículo 7 a 10! De alguna manera se las arreglan para contar 48 generaciones y, de este modo, tienen el total de las 48 generaciones desde Abraham a Sedequías, no de una sola línea de antepasados establecidos, sino empalmando y pegando las dos genealogías, que son totalmente diferentes, una de ellas basada en Miriam (María) y la otra basada en José, ¡el padrasto de Yahshua! ¡Esto a pesar del hecho de que ninguna de las dos genealogías originales mencionan a Sedequías! En esta nueva configuración, que no es otra cosa que un aborto genealógico, eliminan los nombres de Joacim o Jaconias en Mateo 1:11 e insertan Sedequías a fin de poder justificarle como el heredero, por derecho, al trono de David. De esta manera, metiendo a Sedequías y quitando a Jaconias, lo que están haciendo realmente es suicidarse. Estamos a punto de enterarnos de que Sedequías no era, ni mucho menos, un heredero legítimo, sino mas bien un gobernador marioneta.

 

Con esto llegamos a lo que es posiblemente la principal diferencia entre el israelismo británico y la verdad acerca de las dos casas. Cualquier secta que esté dispuesta a cambiar las genealogías en la Palabra de Yahuwah, a pesar de las contundentes advertencia de Deut. 12:32 y Apo. 22:18-19 es un grupo peligroso en el mejor de los casos y blasfemo en el peor. Por lo tanto, cualquier persona con un mínimo de entendimiento acerca de las doctrinas erroneas del israelismo británico, que se esforzase en presentar un cuadro profético de la verdad de las dos casas de una manera tan amplia, está practicando Lashon Harah (es decir, tener una lengua malvada y una disposición maquiavélica). Solo un oscuro elemento dentro del Judaismo Mesiánico, con una agenda cuestionable, tendría la chutzpah (o caradura en castellano puro y duro) de hacer la acusación de que la teología de las dos casas es fruto de la imaginación o una desviación del angloisraelismo. La verdad del asunto es que estas dos doctrinas son diametralmente opuestas la una a la otra, en casi todas las formas posibles. A penas si hay ningún aspecto en que las dos enseñanzas sean similares. Como hemos subrayado en la parte cuarta de esta serie "Lo que el Judaismo Dice Realmente Acerca de la Semilla de José" el único aspecto en el que hay acuerdo es que según LA MANERA DE PENSAR Y LA ENSEÑANZA TRADICIONAL JUDIA RABINICA, la mayoría (no todas) de las diez tribus acabaron por emigrar al noroeste de Europa y a las Américas. Por lo tanto, mientras el Judaismo tradicional y el Israel mesiánico concuerdan en que las naciones anglosajonas del oeste contienen millones de personas efrainitas, el Israel mesiánico no limita el esperma de Efraín a una sola nación ni a una sola serie de naciones o de razas, como lo hace el israelismo británico.

 

El entender el emplazamiento y al ocupante del trono de David es posiblemente la diferencia mas sorprendente entre las dos doctrinas. La doctrina mas diabólica y satánica es la destitución del trono de David de Jerusalén (tanto del terrenal como del celestial) a Londres y la destitución del Mesías Yahshua del trono, con el fin de establecer la Casa de Brunswick-Casa de Hanover-Casa de Windsor, que tiene una base alemana.

 

¡Las Escrituras están perfetamente claras al decir que el Maestro Yahshua está sentado para siempre en el trono de Su reino, que comenzó hace 2000 años! ¡Esta destitución flagrante del Hijo de Yahuwah del trono de David para sentar en él a la Reina Isabel, es blasfemo incluso aunque fuese una mera sugerencia e incluso solo a un corazón no regenerado! Cualquier doctrina, por mucho que se dore la pildora y por muy superficialmente hermosa que parezca, que haya destituido al Mesías Yahshua del trono, con el propósito de colocar a una persona de carne y hueso en él, tiene su origen en lo mas profundo del infierno mismo. Es precisamente esta misma enseñanza equivocada de la destitución del trono de David a Londres, lo que se encuentra en el centro mismo del corazón de la enfermedad del israelismo británico. ¡Aquellos que pertenecen al judaismo mesiánico y practican Lashon Harah, afirmando que el Israel mesiánico se suscribe a semejante engaño, están insinuando que nosotros también participamos en cambiar y escribir de modo diferentes las genealogías de la Palabra de Yahuwah! ¡El Israel mesiánico no está dispuesto a destronar al Rey eterno de los judíos y Maestro de nuestras vidas, con el propósito de colocar a otra persona en el trono de David! Deseamos hacer un llamamiento a aquellos que pertenecen al judaismo mesiánico y que han estado blasfemando en contra de nosotros, haciendo estas falsas acusaciones, pidiéndoles que se arrepientan y que lo hagan por escrito o nosotros haremos como hace la Escritura y les nombraremos de manera pública.

 

Profundicemos en cuanto a las maneras mediante las cuales las Escrituras están siendo torturadas por los angloisraelitas, con el fin de quitarle el trono de David al Hijo de Yahuwah así como su capital a lade ellos, es decir, a Londres. Esta engañosa doctrina comienza con una manera equivocada de entender lo que dice en Jeremías 33:17, que afirma que no faltará a David un hombre que se siente sobre el trono de la Casa de Israel. Este pasaje es uno de los eslabones críticos del israelismo británico. En su libro "The USA and Britain in Prophecy" (Los Estados Unidos y Gran Bretaña en la profecía) Herbert W. Armstrong lo expresa de la siguiente manera: "no solo es que ese trono quedó establecido para siempre, sino que habrá de existir continuamente, para siempre, a lo largo de todas las generaciones. Si el trono de David cesó con Sedequías, en ese caso no sigue existiendo hoy y si no existe en la actualidad, ¿cómo podrá Cristo sentarse en un trono que no existe?" Por lo tanto, los defensores del israelismo británico enseñan que Sedequías es el último rey judío en Judá antes del año 70 del exilio babilonio, que debió tener descendientes, que serían aptos para heredar el trono. Jeremías 52:11 afirma que Sedequías murió en la cautividad babilonia después de que le sacasen los ojos. Por lo tanto, el israelismo británico razona que tiene que haber disponible un heredero de Sedequías que continue ese trono, a fin de que se cumpla lo dicho en Jeremías 33:17. Sobre la base de este falso entendimiento, afirman que según Jeremías 43:5-7 Jeremías fue a Egipto con el propósito de buscar a las hijas de Sedequías y para encontrar en ellas al heredero legítimo al trono. Por lo tanto, razonan que Jeremías volvería a plantar el trono de Sedequías en algun otro lugar (9) para asegurarse de que hubiese quien lo ocupase en cada generación, pero no es esto lo que piensa el movimiento que cree en la existencia de las dos casas, de ninguna de las maneras.

 

Aquellos que pertenecen al movimiento profético de las dos casas, saben que no pueden seguir esta línea de razonamiento. Saben, para empezar, que Jeremías no podría haber vuelto a plantar el trono de David en ninguna parte, cuanto menos en Irlanda, con ninguna de las hijas de Sedequías, puesto que el propio Sedequías no era un heredero legítimo del trono por tres motivos importantes. Primero de todo, Sedequías era el resultado de un nombramiento político, por parte de Nabucodonosor, en Jerusalén y Judea y no el hijo de Joacim. El heredero legítimo del trono era Jeconías, hijo de Joacím. Esto se ve claramente en Segunda de Crónicas 36:10. Sedequías era hermano de Joacím, no su hijo. El hijo de Joacím era el heredero legítimo cuyo nombre era Jeconias (10). De haber estado Jeremías buscando a los hijos de Joaquín, entonces el cuento de hadas del israelismo británico podría haber resultado creíble. ¿Por qué iba a hacer Yahuwah que un profeta como Jeremías, dirigido por el Espíritu, corriese detrás de las hijas de un hombre que no era el heredero legítimo del trono davídico para comenzar? ¡Nunca habría plantado en otra parte el trono de David con las hijas de Sedequías! Sabía perfectamente que el verdadero heredero de Joaquín era Jeconias, no Sedequías, que era el hermano del depuesto rey Joaquin. No ha quedado constancia escrita que verifique que Jeremías buscase tampoco a los hijos de Joaquín y por buena razón. En Jeremías 22:24-30 Yahuwah hace que caiga una maldición generacional eterna e irreversible, sobre la simiente o linaje de Coniah hijo de Joaquín (al que también se le conoce como Conias o Jeconias). Por lo tanto, ningún descendiente de Jeconias, podría sentarse jamás legalmente en el trono de David. No tendría hijos, en el sentido de que ninguno de sus hijos (debido a la maldición generaciones de sus descendientes) podría disfrutar jamás las bendiciones de sentarse en el trono de David. ¡Sabemos que Jeconias tuvo un hijo llamado Salatiel, pero que eso fue después de la maldición sobre la monarquía davídica del linaje de Jeconías y que, por lo tanto, hacía que su descendencia no puediese optar al trono! Israel no tuvo un monarca que ocupase el trono de David, desde los tiempos de Joaquín (Jeconias) hasta el nacimiento virginal de Yahshua.

 

La manera correcta de entender Jeremías 33:17 es que nunca faltará un hombre (o un candidato) que ocupe el trono de David. En cada generación habrá un candidato, que sea idóneo y esté disponible, perteneciente a la Casa de David, a ocupar el trono. ¡Sin embargo, debido a la maldición eterna que pesa sobre el linaje, cada generación será testigo de que el candidato no ascenderá al trono! ¡Por lo tanto, estaba ordenado que desde Jeconias hasta la venida del Mesías, existiese el trono sin que nadie lo ocupase! ¡Aunque hubiese candidatos al trono! En Jeremías 22:4-30, Yahuwah pone fin, de la manera mas sencilla e infantil, a la fatídica monarquia davidica mediante esta maldición! Por lo tanto, incluso aunque Sedequías hubiera sido el heredero legítimo de Joaquín o incluso su hijo o su nieto directo, desde el punto de vista físico (lo cual intenta demostrar el israelismo británico empalmando y pegando estas dos genealogías diferentes) no podría heredar legalmente el trono. Por lo tanto, tenemos dos puntos en contra de que Sedequías sea el heredero legítimo. El tercero y final, además del mas convincente, en contra de Sedequías es que su descendencia se encuentra en Ezequiel 21:25-27. ¡Aquí el mismo Yahuwah es el que elimina a Sedequías, del trono marioneta de Nabucodonosor!

 

¡Por lo tanto, Sedequías y su descendencia han sido divinamente desposeidos de ninguna otra reclamación al trono davídico! En el versículo 25 de Ezequiel 21, Yahuwah llama a Sedequías ¡EL DIRIGENTE EQUIVOCADO O EL PRINCIPE MALVADO DE ISRAEL! ESO, DE POR SI, ES EL RECONOCIMIENTO, POR PARTE DE YAHUWAH, RESPECTO A SEDEQUIAS Y EL QUE OCUPE EL TRONO DE NABUCODONOSOR Y NO EL DE DAVID. NO PUEDE OCUPAR EL TRONO DE DAVID, PUESTO QUE NO ES EL CANDIDATO APROPIADO Y TAMPOCO ES EL SANTO! LA MALDICION DE JECONIAS ASEGURARIA QUE EL SANTO DE ISRAEL FUESE EL PROXIMO OCUPANTE LITERAL DEL TRONO! Pero no acaba ahí. En el versículo 26 de Ezequiel 21 Yahuwah instruyó a Ezequíel que le quitase la corona a Sedequías, así como el turbante real de la autoridad, humillándole de ese modo y haciendo que quedase desposeido del trono. Sedequías es el ocupante ilegal y exaltado del trono de David acerca del cual se le dice a Ezequiel que está siendo humillado. ¡La exaltación del humilde o El Humilde, es una clara referencia mesiánica a la exaltación del Mesías, como siervo humilde y sufriente, que habría de convertirse en el PRIMER OCUPANTE LEGITIMO DEL TRONO DE DAVID DESPUES DE Joaquín. Nuestro Maestro Yahshua se convertiría además en el ocupante final, comenzando por Su primera venida, no con Su segunda venida, como afirma el israelismo británico! La declaración de Lucas 1:32-33, hecha en relación directa con Su nacimiento virginal en el pesebre de Belén, afirma que se sentará en el trono davídico, gobernando la Casa de Jacob (las 12 tribus) para siempre. ¡Está claro, por lo tanto, que Su reino sobre los hijos de Jacob comenzó desde Su nacimiento, no con Su regreso prometido!

 

Entonces, en Ezequíel 21:27 para enfatizarlo aún mas, Yahuwah dice tres veces: "¡en ruinas, en ruinas, en ruinas la convertiré!" queriendo decir que iba a poner fin, de manera permanente, a cualquiera y a todos los ocupantes por intentar sentarse en el trono de David, como hizo el ilegítimo y equivocado príncipe Sedequías. Además Yahuwah afirma que esta destrucción iba a ser tan absoluta, que ningún mortal podría reestablecer el trono, hasta la venida del Mesías Yahshua o de Aquel a quien le pertenece en justicia. ¡Yahuwah se lo entregará solo a él! ¡Esta declaración en Ezequiel 21:27 contrasta por completo con el ilegítimo y equivocado Sedequías, que un día será reemplazado por el Justo, el Mesías humilde (11), que habrá de regresar, al cual le pertenece para siempre el trono eterno de David! Esta es la clara y sencilla enseñanza de las Escrituras, así como la clara y sencilla enseñanza del glorioso movimiento de restauración de las dos casas de Israel.

 

Además de cambiar el israelismo británico las genealogías bíblicas, lleva su versión, estilo cuento de hadas, un paso mas alla. La hija de Sedequías había ido a Egipto y, de ese modo, se había colocado bajo el castigo divino, no bajo la bendición. (12) El israelismo británico enseña que el limitado número de personas que escaparon de Egipto en Jeremías 44:28 incluía a la semilla real de las hijas de Sedequías. Como muestra con anterioridad, las hijas no eran reales ni mucho menos, sino que mas bien se hallaban bajo la doble maldición, como herederas de la declaración generacional de Jeremías 22:24-30, asi como por el acto de desobediencia de huir de Egipto, lo cual era contrario a las órdenes de Yahuwah. ¡Por lo tanto, al ser Jeremías lleno y dirigido por el Espíritu, no habría intentado nunca el rescate de la semilla real de Egipto, porque para empezar no eran de simiente real! Mas bien, la misión de Jeremías en Egipto era la de proclamar la insatisfacción divina y la advertencia a los judaitas, que se habían refugiado en Egipto, en lugar de ceder tranquilamente y de haber conseguido que sus vidas hubieran sido libradas, como Yahuwah había suplicado que hiciesen por medio de Jeremías.

 

El cuento de hadas del israelismo británico, respecto a que el trono de David iba a ser trasladado a Londres continua como sigue: alrededor del año 580 a. de C. el profeta Jeremías aparece en Irlanda con Tea Tefi, la hija real de Sedequías, la que es, por así decirlo, el pilar de Jacob, el arpa de David con el escriba llamado Simon Breach, que se supone que representa al escriba Baruk. Según la leyenda irlandesa, este anciano del oriente se llama Olam Fodlah. Según este cuento de hadas, Tea Tefi se casa con un rey irlandés judaita, llamado Rey Eochaidh sobre esta piedra, completando de este modo la misión de replantar el trono de David en Irlanda. La supuesta ceremonia de coronación tuvo lugar encima de esta roca (conocida también como Lia Fail) después de que Judá fuese desterrado de Israel. La arqueología presenta una imagia diferente sobre el origen de Lia Fail. ¡La Lia Fail no acompañó nunca a Tea Tefi desde Egipto, sino que su color y su composición hace que la mayoría de los expertos crean que es de origen escocés! (13)

 

Por tanto, mediante el supuesto matrimonio de Tea Tefi con un rey judío irlandes (sobre la Lia Fail), cuyos antepasados habían vivido en Irlanda, procedentes de España, durante 500 años antes de que se supone que llegase Jeremías. Así dice la leyenda que Yahuwah reunió a la línea real de los Fares, representados por Tea Tefi, con la línea de Zara de Judá, representada por el rey irlandés Eochaidh. Se cree, por lo tanto, que el trono resultante, reunido y plantado de nuevo en Irlanda, reunió en Irlanda a las líneas reales de Fares y de Zara, pertenecientes a la realeza de Judá. Este acto, por parte de Jeremías, supuestamente conservó el trono, haciendo que estuviese a salvo, apartado de la conquista y la lucha de Nabucodonosor y el levantamiento en los 70 años del exilio. Este cuento de hadas continua diciendo que mas adelante el trono fue llevado a Escocia y después a Londres, alrededor del 1296 A.D., lo cual afirman fue profetizado por Ezequiel 21:25-27. Cuando se entiende como es debido, los tres traslados, mencionados en Ezequiel 21, no pueden referirse a los supuestos tres traslados de la Lia Fgail, bajo el trono de la coronación, siendo transportada desde Jerusalén a Irlanda, desde Irlanda a Escocia y desde allí a Londres, donde se dice que permanece conservado hasta que regrese Yahshua. Esta invención acerca de los tres traslados quedó por fin descartada por completo, cuando el anterior Primer Ministro británico John Mayor, regresó a Lia Fail en Escocia en 1996, haciendo un total de cuatro regresos! Con una decisión política, Mayor destruyó para siempre una de las creencias básicas del angloisraelismo. Lu cual fue una decisión "mayor". ¡Hemos intentado hacer una rima! ¡En una ceremonia especial, el anterior Primer Ministro Mayor dijo: "Creo que en éste, el 700 aniversario, de su traslado desde Escocia, es apropiado devolverla (la Lia Fail) a su hogar histórico!" (14)

 

Por lo tanto, incluso desde el punto de vista histórico práctico, no se puede argumentar que el trono de David se encuentra ya en Londres. El cuarto derrocamiento ha dejado a los defensores de esta venenosa enseñanza antijudía en dificultades para dar respuesta en sus filas, que están rápidamente disminuyendo. ¡La fantasía del Israel británico, en su formato más básico, es una serie de alucinaciones mentales, acompañadas por una lógica deficiente, entre un pueblo que se regodea en sus deseos imaginativos! ¡La declaración de los tres derracamientos, aceptada tal y como es, muestra el desagrado absoluto de Yahuwah con Sedequías y su malvado reinado! Mediante esta declaración, Yahuwah se asegura de que nadie pueda practicar jamás el mal de Sedequías, suponiéndose que ocupen el trono de David, hasta que venga Yashua, el heredero legítimo. Desde que vino la primera vez, nunca mas habría de ser el trono derrocado, puesto que según dice en Lucas 1:32-33, El reinará y ocupará el trono para siempre. ¡Para siempre quiere decir precisamente eso: para siempre!

 

A pesar de las intensas excavaciones históricas en busca de hechos comprobables que colaboren con la tontería de Tea Tefi, no existe ni el mas mínimo vestigio de evidencia histórica fidedigna ni comprobable, de que Jeremías estuviese jamás en Irlanda, cuanto menos con la hija de Sedequías, que era doblemente maldecida como heredera falsa del trono. En toda la historia irlandesa, incluyendo el totalmente fidedigno "Irish Antiquities" (Antiguedades Irlandesas") una fuente respetada, no se hace mención alguna de que hubiese un grupo que viajase y que llegase del oriente. De haber existido el mas leve vestigio de evidencia histórica al que aferrarse, el israelismo británico lo hubiese hecho ¿no le parece? Solo se halla en la leyenda irlandesa de este cuento de hadas, recitado por los escolares. Es útil recordar que la mayoría de estas bien conocidas leyendas fueron escritas después del 600 A.D., es decir, mil años después de los supuestos acontecimientos de la llegada de Jeremías con Tea Tefi. Según el historiador cristiano Nick Greer "al leer la literatura angloisraelita, uno se da cuenta de que generalmente depende del folklore, de las leyendas, de las genealogías cuasihistóricas y de dudosas etimologías.! (15) Es sobre estás arenas movedizas sobre las que el israelismo británico apoya su veracidad.

 

¡Como constancia bíblica diremos que los que escaparon al castigo en Egipto no fueron a Irlanda, sino que las Escrituras afirman más bien que regresaron a Judá! (16) Las Escrituras guardan un silencio sepulcral acerca de un viaje a Irlanda y nosotros debemos de hacer lo mismo. Lo que sí deducimos, basándonos en las Escrituras, es que el trono no se trasladó nunca de Jerusalén a dos o tres emplazamientos diferentes, sino mas bien que quedó vacante (desde Jeconías hasta el Mesías), reservado para el Justo. ¿De qué modo escapó Yahshua a la maldición de Joaquín? ¡En primer lugar, el nacimiento virginal del Mesías, dejó de lado la necesidad de un padre humano, PASANDO POR ALTO, DE ESTE MODO, LA MALDICION DE LOS DESCENDIENTES FISICOS DE JECONIAS! Además la genealogía de Lucas es la de su madre Miriam, por medio de Natán, hijo de David y no de Salomón, hijo de David. De esta manera Yahuwah desvia la maldición eterna de la descendencia de Jeconías, incluyendo a los descendientes de Salomón de Jeconías, permitiendo a Yahshua heredar el trono de Su madre Miriam, por medio de Natán no de Salomón. El linaje de Natán no había sido divinamente maldecido y, por lo tanto, Yahshua nació como hijo de David y Natán, así como el hijo de David y de Salomón. El nacimiento virginal no fue solo un milagro de proporciones masivas, como señal de la venida de Emmanu-El, sino una necesidad biológica si Yahshua había de heredar el trono de David, tanto del linaje de Natán como del de Salomón. ¡José, el padrastro de Yahshua, estaba maldecido como descendiente físico y directo de Jeconías! ¡Así que, el nacimiento virginal liberó a Yahshua de la maldición de Jeconías, permitiéndole heredar el trono, tanto por parte de Miriam como de José, haciendo que fuese heredero, por partida doble! ¡Ningún ser humano podría haber dejado a un lado la maldición eterna de Jeconías como Yahshua, puesto que ninguno de ellos, excepto Yahshua había nacido de una virgen! Puesto que ninguna de las semillas de Jeconías podía heredar el trono sin un nacimiento virginal y teniendo en cuenta que el nacimiento virginal fue un acontecimiento que solo se produjo una vez, todos los reyes ingleses que reclaman el trono de David (nada menos que POR PARTE DE SALOMON) se están engañando de manera miserable. Por lo tanto, la imaginación desbordada de los israelitas británicos, por todas partes, es una imaginación del mas elevado orden, que rivaliza con las producciones de Hollywood como puedan ser El Mago de Oz, Pinocho y Alicia en el País de las Maravillas. Al menos sabemos quién creó y legitimamente heredó esas producciones. ¡En cuanto a la identidad del autor de Olam Fodlah-Tea Tefi, de los cuentos irlandeses, si hubiésemos de aventurar una opinión, intentando adivinar, diríamos que el autor mas factible es S.A.-TAN!

 

Oseas 3:4-5 anula por completo las reclamaciones del israelismo británico de cada generación que afirma que tiene que haber un judaita davídico gobernando y sentado en el trono de David (a fin de que ni siquiera exista), gobernando la Casa de Efraín. Oseas 2:4-5 proclama el hecho histórico, de que los hijos de Israel o las 12 tribus, incluyendo a los efrainitas, no tendrían ninguna clase de rey DURANTE MUCHOS DIAS. Esta situación del trono vacío tocaría a su fin, según el versículo 5 de Oseas 3, en los últimos días de esta era, o al final del Olam Hazeh. Solamente por medio de teshuvah y de arrepentimiento hacia Yahuwah, permitiría El que los hijos de Israel tuviesen un rey davídico, EN LOS ULTIMOS DIAS. Estos comenzaron con la primera venida de Yahshua y acabarán pronto con la venida del atid lavoh o el reino milenario, comenzando con Su segunda venida. Por lo tanto, desde Jeconías, en el circa 600 a. de C., hasta el próximo heredero legítimo de Israel, transcurrirían unos 600 años. Esto evidentemente bloquearía la supuesta ascensión de Sedequías al trono davídico. Teshuvah hacía y por medio del David Superior (Yahshua) dará como resultado que el pueblo de Israel (las 12 tribus completas) acaben los largos días (600 años) sin un rey davídico. El israelismo británico continua aferrándose a la falsa noción de que durante esos 600 años además de los 2000 últimos años, el ocupante al trono ha estado sentado en Europa. ¡Las Escrituras enseñan que durante esos 600 años, el pueblo de Israel estaría sin un rey davídico, hasta que el Heredero Legítimo venga, según dice en Ezequiél 21:27. Este heredero legítimo o el Santo no permitirá que se siente nadie mas sobre el trono hasta que El venga! El mismo se sentará en el trono como Emmanu-el para siempre jamás.

 

Una mayor seguridad de la presencia permanente de Yahshua sobre el trono hizo que El lo eliminase del ámbito de la Jerusalén terrenal, a la Jerusalén celestial de arriba, que está libre de los que lo reclaman y donde El se sienta en el trono, de manera indisputable y siendo el Cordero sin rival. Por lo tanto, hoy encontramos el trono de David en el cielo, con el Cordero Yahuwah, sentado sobre él para siempre. No lo encontrará usted en Londres, con la reina Isabel sentada sobre él. Ha sido trasladado al cielo para conservarlo y tenerlo a salvo de los diferentes religionistas, que pretenderían abusar el trono vacío visible, para su propia ventaja personal, para su enriquecimiento o sus planes. El trono de David reposa, plantado en el tercero de los tres cielos (fuera del alcance de S.A.-TAN), protegido por el Padre celestial y no por Jeremías, según el salmo 110:1 y otros numerosos pasajes del libro de Hebreos. ¡En los cielos ningún hombre mortal puede tocar el trono ni siquiera verlo, hasta que Yahuwah mismo decida cuándo es el momento oportuno para que regrese a Jerusalén, no a Londres!

 

Cuando regrese Yahshua a Jerusalén (17) como el Rey de reyes, el trono estará con El, puesto que va dondequiera que El vaya. A Su regreso a Jerusalén en el Monte de los Olivos, El lo establecerá, de manera visible, de nuevo en Jerusalén en el Monte del Templo, de donde vino originalmente. Yahuwah, en Su infinita sabiduría, ha protegido el trono, colocándolo fuera del alcance de aquellos como los israelitas británicos. ¡A muchos otros grupos como los Rastafaris, que han intentado colocar a Hailie Selasie en el trono por medio de su teología, se les ha impedido conseguirlo, de esta manera. Ninguna carne ni sangre puede compartir en y, de ese modo, robarle Su gloria! Su trono ha sido colocado fuera del alcance de todos, aparte de los israelitas nacidos de nuevo y los gerim individuales de todas las naciones y lenguas que caminan en fe y no conforme a la vista.

 

Según Hechos 15:16 Yahshua ha estado reconstruyendo Su Tabernáculo de David en la tierra desde el cielo y volverá a colocarlo de manera visible en la tierra en toda su forma completa y real, a Su regreso, cuando Satanás permanecerá atado durante mil años. (18) Si la Gran Bretaña y los Estados Unidos son exclusivamente Efraín y Manasés, ¿por qué no buscan estas dos naciones a Yahuwah, como se ha profetizado que habría de hacer Israel durante los últimos días? (19) ¿Por qué se encuentran estas dos naciones de la tierra a la cabeza de la producción y distribución de toda clase de materiales impios, juntamente con el acompañamiento de espírituos impuros?

 

En lugar de hacerlo, ambas naciones se van apartando cada vez mas de Yahuwah, no regresando a El. Por lo tanto, es preciso que haya otros efrainitas y judaitas, aparte de estas dos naciones, que estén regresando a Yahuwah y a la justicia por medio de Su Hijo, a fin de que se cumpla la profecía del capítulo 3 de Oseas. Sabemos que éste es el caso, respecto a los creyentes judíos y no judíos, que han nacido de nuevo y se han unido al Tabernáculo de David. El pasaje de Oseas 3:4-5 revela que en los últimos días las ovejas perdidas de ambas casas de Israel regresarán de manera individual (no como las dos naciones de Gran Bretaña y Estados Unidos) al arrepentimiento y teshuvah, procedentes de la diáspora global.

 

Esto no pretende contradecir lo dicho en escritos anteriores, en los que usamos muchas judías fuentes antiguas y modernas, que revelan que tanto Gran Bretaña como, de manera especial, los Estados Unidos (20), contienen ambas grandes multitudes de población israelita procedente de ambas casas. De ahí que la emigración de las diez tribus, asi como de Judá en la Diáspora, han sido bíblica e historicamente verificadas y es fácil seguirles la pista. (21) ¡Pero no podemos decir lo mismo respecto a la posibilidad de seguirle la pista y sobre el traslado del trono davídico a Irlanda por parte del profeta Jeremías desbancando, de ese modo, el pilar principal de la teología anglo-israelita!

 

Los israelitas mesiánicos pueden aceptar estos patrones de emigración en dirección oeste, por parte de algunos israelitas británicos como hecho, puesto que nuestras fuentes de confirmación son judías e históricas, Pero, a pesar de ello, no podemos tolerar las otras enseñanzas del anglo-Israel, por causa de otros numerosos aspectos problemáticos que ya hemos subrayado con anterioridad. Sin embargo, existen aquellos que, por ignorancia y en ocasiones de buena gana, acusan a la teología del Israel mesiánico de ser una copia exacta del israelismo británico. Esa es una acusación de lo mas absurda, puesto que todos los israelitas mesiánicos aman a sus hermanos judíos y están dispuestos a apoyarles en la vida y en la muerte. Los israelitas mesiánicos han colocado, por definición, a Yahshua en el trono de David, tanto mediante una relación histórica como personal y espiritual. Ni un solo israelita mesiánico soñaría jamás con ni siquiera sugerir que, de algun modo, Yahshua no se encuentra en el trono de David, pero que sí lo está la reina Isabel.

 

¡Advierto a todos aquellos que usan esta creencia unida del Israel británico y la teología de las dos casas, acerca de este tema en particular, sobre los patrones de emigración de las diez tribus, que son verificables, desde el punto de vista histórico, como una especie de apoyo de las dos casas de la teología del anglo-israelismo, que dejen la Lashon Harah (la lengua malvada)! Sus papeles blancos se han convertido en instrumentos de injusticia y de calumnia, de modo que necesitan arrepentirse con un espíritu de mansedumbre. Estos mensajeros han malinterpretado, de propósito, la teología de las dos casas, para que dé la impresión de que son copias exactas de los punto de vista distorsionados del Israel británico. El incluir a todo el Israel mesiánico, metiéndoles a todos en el mismo saco que la herejia y la blasfemia de nuestro movimiento sionista, basado en la Toráh, del israelismo británico, es participar en calumnias. Ni Battya Wooteen ni este autor hemos usado jamás ni deseado usar ninguna fuente o material de investigación de ningún israelismo británico, para establecer la verdad acerca de las dos casas. No solo nos hemos negado a hacerlo, sino que hasta ahora nos hemos negado a tratar el tema, debido a lo que pensábamos que era la naturaleza engañosa de las diferencias existentes en los movimientos. Por desgracia, debido al éxito obtenido por el demonio en incitar la carnalidad de algunos de nuestros hermanos judíos mesiánicos y cristianos, nos vemos ahora obligados a hacer esta aclaración.

 

El israelismo británico enseña además que los "cristianos" anglosajones blancos protestantes son los únicos israelitos legítimos. Sin embargo, el Israel mesiánico reconoció que la condición permanente y constante de la Comunidad de Israel, ha sido sellada y decisivamente determinada por la fe bíblica salvadora, no solo por pedigri. El anglo-israelismo es un llamamiento total solo al pedigri, como la única base de la aceptación de sus enseñanzas. ¡El Israel mesiánico reconoce que es el remanente de las dos casas, redimido y lleno de fe, además de los que no son israelitas, pero que poseen la fe, que posiblemente no tengan pedigri israelita, el que componen el Israel de Yahuwah, según dice en Gálatas 6:16!, que Israel es una manifestación del ministerio de inclusión y no de exclusión de Yahshua, mientras que el israelismo británico no deja lugar, en su teología retorcida, para el judío que tiene fe, para los judíos que no son salvos o para el que no es israelita, pero tiene fe. ¡Por lo tanto, no consideran como legítimos a dos de cada tres grupos de personas, que componen en la actualidad el cuerpo de Yahshua! Esta es una diferencia muy evidente entre los dos movimientos. ¡Un grupo es bíblico y lo incluye todo mientras que el otro resulta vergonzosamente racista!

 

El israelismo británico es además una de las principales fuerzas que se ocultan tras la controversia acerca de Solo la Versión del Rey Jaime, enseñando a los protestantes bien intenciados por doquier, que la Versión (inglesa) del Rey Jaime es la única traducción de la Biblia que es digna de confianza. El israelismo británico ha alimentado el odio y la intolerancia que ha dado pie a quemar otras ediciones de las Escrituras en el pasado. Tacha de herejes a aquellos que se atreven a llevar o a estudiar otras Biblias para edificación o aclaración. ¿De dónde procede esta arrogancia? ¡Por supuesto que de su doctrina retorcida acerca del trono de David, como es natural! Puesto que, según su falaz razonamiento, el trono de Inglaterra es el trono de David, ¿quién mejor que un descendiente de la casa real de David, el propio Rey Jaime, para ser autor de la versión autorizada inglesa? ¡La Versión Autorizada está autorizada por el israelismo británico! Este movimiento considera que el Rey Jaime, por ser descendiente directo de David, por medio de Sedequías, fue escogido por Yahuwah para producir el don de la traducción inerrante al inglés. Por lo tanto, cualquiera que rechace la Biblia del Rey Jaime-Davídica, como la única traducción autoritaria de la Palabra de Yahuwah al inglés, no era súbdito del trono de David (el Rey Jorge) la Iglesia de Inglaterra (su perversión del Sanhedrín judío) y la gente del israelismo británico. Desde el punto de vista histórico, la Biblia del Rey Jaime se convirtió en la prueba definitiva, entre los verdaderos israelitas y los impostores, es decir, "los judíos que habían matado a Cristo", que se hacían pasar por israelitas. Solo los verdaderos israelitas, que se habían sometido al trono falso de David en Londres y a la Iglesia de Inglaterra, llevarían y jurarían por la Biblia del Rey Jaime. ¿Le suena a usted esto como la enseñanza del movimiento de las dos casas?

 

En el movimiento verdadero y puro de las dos casas podemos encontrar toda clase de Biblias y toda clase de traducciones; las hay para todos los gustos. ¿Le suena eso como si los defensores de las dos casas fuesen, en realidad, anglo-israelitas disfrazados? Va siendo hora de que los críticos de la teología de las dos casas, dejen de mentir y falsificar sus llamados papeles blancos y de que se arrepientan ante el Todopoderoso Yahuwah, por tener una lengua que está siempre juzgando y engañando. La verdad histórica de la recopilación de la Biblia del Rey Jaime es bastante diferente a lo que pretende que es el israelismo británico. Está basada en el Nuevo Testamento griego, publicado por el Católico Romano Robert Estenne, (también llamado Stephanus para resumir) en 1550. El manuscrito de Stephanus se basa en fragmentos bizantinos que se han unido, ninguno de los cuales es anterior al 1200 A.D. Este manuscrito tenía el libro de Apocalipsis en latín, no en griego. Por lo tanto, los manuscritos usados para la producción de la Biblia del Rey Jaime son fragmentados, linguisticamente mezclados e incluyen adiciones Católico Romanas falsificadas, como pueda ser 1 de Juan 5:7 y otros versículos cuestionables como puedan ser Mateo 28:18-20. ¡Estos y otros versículos de la Biblia del Rey Jaime no se encuentran en ninguna otra parte en ningún manuscrito mas antiguo, que date del siglo quinto A.D. (como puedan ser los respetados Manuscritos Sinaíticos)!

 

Por lo tanto, el ser leal solo a la Biblia del Rey Jaime revela que los defensores del israelismo británico son de hecho a la Iglesia Católico Romana y a sus prácticas rameras espirituales papistas, que a algún supuesto trono de David basado en Londres. ¡La mayoría de los que israelitas británicos posiblemente se revolverían en sus tumbas si descubriesen el verdadero transfondo del manuscrito "original", usado por la Biblia de su reverenciado Rey Jaimito! ¡Un destacado teólogo católico romano y hombre de iglesia, que lo unió todo! Que estos hechos aquí expuestos sirvan de advertencia a cualquier rabino mesiánico que da, a propósito, por un lado, a un nuevo creyente judío una Biblia del Rey Jaime, propagada y distribuida originalmente por los que odiaban a los judíos, y luego se da la vuelta y compara el Israel mesiánico que ama a los judíos con el anglo-israelismo. Es la labor del pastor saber e investigar estas cosas, a fin de proteger a las ovejas de los lobos regliosos de la teología del reemplazamiento que lo unieron. ¡La Biblia del Rey Jaime es una traducción legítima, pero no es superior a otras traducciones y lleva consigo el estigma de los planes del anglo-israelismo, juntamente con varios textos que fueron añadidos hace 500 años! Los del israelismo británico son cristianos fundamentales, que no tienen ninguna prisa por exponer las pocos conocidas, pero bien documentadas prácticas homosexuales y pedófilas del mismo Rey Jaime!

 

El colonialismo británico histórico de los años 1900, con su costumbre de ahogar las libertades humanas, era además el resultado de una teología que proclamaba que puesto que se había profetizado que Israel sería la poseedora de las puertas de todos sus enemigos, el dominio del mundo era, por lo tanto, su derecho de primogenitura como José. De este modo, siempre que la Gran Bretaña flexionaba su poderio militar de una manera injustificada, actuando como policías del mundo por medio del imperialismo, cuando se les llamaba a rendir cuentas, sencillamente se limitaban a recitar las doctrinas bíblicas de la abundancia territorial prometida a Israel en la Biblia, mientras continuaban convirtiendo a personas inocentes en esclavas y las sometian a servidumbre. Muchos de los que ocupaban cargos de autoridad en el gobierno se valieron de las creencias del israelismo británico para justificar un colonialismo e imperialismo sin límites. Como lo explica un miembro del israelismo británico: "Sencillamente gobernamos todas las naciones, porque El que lo ha decretado de este modo dice: ‘porque la nación y el reino que no te sirva (Israel-Gran Bretaña) perecerá, sí, esas naciones serán totalmente desoladas.’" Por lo tanto, no existen las naciones ni pueblos, sino que el mundo será uno e indivisible y el mundo será una Gran Bretaña." (22) De ahí que el racismo natural y el resultante colonialismo agresivo de la teología del israelismo británico sea una conquista global, desde el punto de vista militar, puesto que ninguna otra nación ha sido ni siquiera reconocida fuera de su absorción colonial, bajo el gobierno de la Gran Bretaña.

 

El Israel mesiánico, por otro lado, sigue el simple ejemplo bíblico de construir el Reino de Yahshua, que no es de este mundo, sino que es mas bien un Reino que habrá de establecerse por medio de la Gran Comisión y que se convertirá en una realidad en la edad del milenio o del Atid Lavoh, la edad venidera. Las metas del Israel mesiánico son ver a Yahshua reunir y atraer a Israel por medio del Ruach (Espíritu) y no por el poder, para que sea una esposa preparada para cumplir las obligaciones y los deberes del Reino. Lo último en lo que participaría el Israel mesiánico sería en la conquista física de territorio que no le pertenece a Israel, simplemente por el valor del territorio. Por lo tanto, el comparar la teología agresiva del colonialismo con una pacifista, que proclama la restauración de Israel por el Mesías de Yahuwah, es una espantosa calumnia y fruto de un comportamiento nefasto.

 

Además el israelismo británico tienen tendencia a fijar fechas. Muchos proclamaron falsamente que la Guerra del Golfo de 1991 era el Armagedón de Apocalipsis 16:16 y en el pasado fijaron el año 1917 como la fecha original en la que se produciría el regreso secreto de Yahshua. (23) ¡Esta manera de fijar fechas ha causado incluso que personas que eran oradores destacados del israelismo británico, como el Dr. John Matthews, en 1945 se refiriesen al anglo-israelismo como una teoría!(24) A pesar de haber quedado muchas veces en verguenza, eso no ha hecho que disminuya la atracción que siente este movimiento por fijar fechas. Aquellos del Israel mesiánico, por contraste, siguen la advertencia de su Maestro en Hechos 1:7 que no nos toca a nosotros saber los tiempos ni las sazones que están relacionadas con la pronta y total restauración de Israel. El Maestro Yahshua nos dijo, sin embargo, cómo edificar a Israel, dejándonos la Gran Comisión de Hechos 1:8.

 

En la práctica, el israelismo británico se encuentra mas cerca del Catolicismo Romano de lo que lo está de la teología acerca de las dos casas. El papismo romano presenta al Papa Juan Pablo como el vicario del Mesías en Roma en el trono davídico de Yahshua. Por ello, el israelismo británico se encuentra en su forma mas vulnerable y es muy semejante al papismo, en que destaca a un ser humano, que afirma representar al Mesías, cómodamente sentado en el trono davídico del Mesías, en lugar de que el Mesías mismo ocupe Su propio trono. Esto coloca al israelismo británico en la misma categoría que los Testigos de Jehová o los ruselistas, que afirman que el trono de David se materializó aquí en la tierra allá por el año 1914 solo ante unas pocas personas selectas. El israelismo británico tiene mucho mas en común con los ruselistas y los papistas que con los del Israel mesiánico, que no tendrían nunca la chutzpah de desplazar a Yashua como Mesías y Maestro sobre todo el Israel del Nuevo Pacto. El Israel mesiánico y la verdad de las dos casas, considera estas venidas secretas de Yahshua y del trono de David como completas herejias y un ejemplo extremo de la interpretación privada de las Escrituras, acerca de lo cual nos advirtió Simón Kefa (Pedro)! (25)

 

En lo que se refiere al idioma existe otra discrepancia fundamental entre el lenguaje bíblico de las dos casas en hebreo y el del israelismo británico y su idioma inglés. Según Herbert W. Armstrong en su libro "The United States and Britain in Prophecy" (Los Estados Unidos y Gran Bretaña en la Profecía) dice que "las Escrituras enseñan claramente que los israelitas cambiarían su idioma hebreo por el inglés (Isaías 28:11). El Eterno dejaría de hablarles en su idioma hebreo nativo, para hablar en otra lengua a este pueblo-israelitas. Esto no se puede aplicar a los judíos que aún leen sus Biblias en la lengua hebrea." Los del movimiento de las dos casas no pretenden estudiar la nueva lengua materna del anglo-israelismo o inglés, sino que están mas bien experimentando un regreso de propósito al hebreo, su lengua ancestral. Las clases de hebreo abundan en todo el movimiento del Israel mesiánico. La mayor parte del movimiento de las dos casas, cree con razón que Isaías 28:11 y Primera de Corintios 14:21 se refiere a la señal del don de lenguas, que se manifiesta en la ekklesia. Los defensores de las dos casas no aceptan que Isaías 28:11 promete un nuevo idioma nacional solo a los efrainitas anglosajones, reemplazando, de hecho, al hebreo como lengua materna de Israel. Los versículos citados por Armstrong, son sencillamente una promesa sobre los dialectos que fue dada en Hechos, capítulo dos en el año 33 A.D., para la enseñanza y proclamación del evangelio en las diferentes partes de la tierra.

 

El israelismo británico ofrece una explicación de lo mas retorcida acerca de exactamente qué o mas bien quién es el renuevo tierno de Ezequiel 17:22. Afirman que este renuevo es la hija de Sedequías, ya que era una muchacha joven e inocente como el renuevo. Si ella (Tea Tefi) era tan inocente, ¿por qué estaba en Egipto desafiando la advertencia concreta de Yahuwah al remanente de Judá, de no huir allí para su protección en el año 586 a. de C.? El renuevo tierno no es la hija del rey (Tea Tefi) sino mas bien YAHSHUA EL MESIAS, el mismo renuevo tierno del que se habla en el pasaje acerca del siervo sufriente en Isaías 53:2. El Israel mesiánico concuerda con la interpretación clásica de Ezequiel 17 como una profecía estrictamente mesiánica.

 

Los defensores de las dos casas, en su deseo por ser grandes en el reino del Israel restaurado en el milenio, practican y enseñan la Toráh estableciendo, de ese modo, una relación especial con todos los segmentos del judaismo basado en la Toráh, incluyendo al mesiánico. El israelismo británico, por otro lado, considera la Toráh como el contrato matrimonial de un pueblo rechazado y despreciado hace ya mucho tiempo, que son los judíos. (¡Solo Herbert W. Armstrong, algo a su favor, se desvió de la Iglesia de Inglaterra, basada en el inglés, sobre la cuestión de la perpetuidad de la validez de la Toráh!) ¿Suena esto como si la verdad sobre las dos casas y el israelismo británicos fuesen dos teologías paralelas? ¡Solamente los que han sido totalmente engañados o aquellos que tienen un espíritu controlador en el Mesianismo, se atreverían a hacer semejante acusación!!

 

El situar de manera paralela al israelismo británico y la teología acerca de las dos casas como teología racista, es una señal de la ignorancia y la falta de conocimientos en este campo en particular. Los hechos son los hechos. Los estudios históricos, geográficos y etimológicos de toda clase de diversos campos teológicos, incluyendo al judaismo de primera fila, han ofrecido pruebas abrumadoras, en el sentido de que la mayoría de las naciones de habla inglesa del oeste y especialmente de Europa y los Estados Unidos descienden de las diez tribus. De ahí que todas las notas a pie de página ofrecidas en la parte cuarta de la serie sobre la restauración siguen siendo válidas. Además de los pueblos anglosajones de habla inglesa en el oeste (26), otros israelitas emigraron y fueron asimilados en regiones como las de Asia Menor (Antioquía), el sur de Rusia, Macedonia (la Europa del sur), Africa, tanto del norte como del sur, y las anteriores regiones de los imperios medopersa y caldeo (el moderno Irak e Iran) y Siria. Eso es lo que separa a la verdad acerca de las dos casas del anglo-israelismo. El Israel mesiánico no limita los patrones de emigración efrainita a una sola nación o a una sola comunidad de naciones, como Gran Bretaña, aunque admitimos que numerosos pueblos en Gran Bretaña descienden de la semilla de Efraín.

 

¡El Israel mesiánico proclama lo que problaman las Escrituras! Que la Casa de Israel (las diez tribus) fue absorbida o se convirtió en una sola carne con las naciones paganas (27) si bien no quedó limitada a los pueblos anglosajones o judíos. La postura acerca de las dos casas está totalmente apoyada por los Judíos Ortodoxos del Chabad Lubavitch, uno de los grupos tradicionales mas estrictos de la Toráh mesiánica, como se puede ver de primera mano en sus páginas Web: http://moshach.com/tribes. Siguen la pista a los descubrimientos relacionados con las diez tribus, con informes modernos de verificación que se refieren con exactitud a estas ovejas perdidas como josefitas y no como judíos.

 

Por lo tanto, como se ha demostrado, desde el punto de vista histórico, la mayor parte del pueblo británico son una gran parte de aquellos que descienden de las diez tribus. Sin embargo, al contrario que los anglo-israelitas, el Israel mesiánico no limita su descendencia solo a un puñado de naciones de habla inglesa. Después de todo no fue este autor el que siguió la pista de las diez tribus de las Islas de Tarshish (28) a España y a Inglaterra en Europa. Fueron mas bien eruditos respetables, como Abrabanel y Raschi. (29) Por lo tanto, la identificación de las diez tribus como si se hallasen principalmente en el oeste, no tiene nada que ver con las fuentes de información del anglo-israelismo para llegar a las conclusiones acerca de las dos casas. Mas bien como rabino judío, mis conclusiones se basan principalmente en mis antepasados judíos tradicionales, que son destacados expertos en este terreno, sin que tuviesen un plan nefasto. Cuando sus conclusiones, juntamente con las de historiadores muy respetados, como puedan ser Ptolomeo, Homero y Edersheim validan la Escritura, tenemos los dos testigos o mas, necesarios para estar de acuerdo con la Toráh. ¡Nada mas las citas de Edersheim demuestran por sí solas que en los tiempos de Yahshua, las diez tribus estaban consideradas como ausentes de Israel, vagando por otras naciones (paganas)! ¡No se hace referencia a ellas como si hubieran estado vagando en el Monte del Templo! (30)

 

Por lo tanto, si bien podemos condenar, en general, la teología del israelismo británico, lo que no podemos hacer es negar la historicidad de los patrones documentados de la emigración en dirección oeste, solo porque el judaismo mesiánico lo haya solicitado. Sin embargo, a pesar de un entendimiento correcto de los enormes patrones de emigración en Inglaterra misma, el israelismo británico debe de seguir considerado como una doctrina demoniaca, en la que existe una diferencia de 180 grados con la teología acerca de las dos casas, en sus enseñanzas contrarias a la ortodoxia.